El martes 28 de abril se realizó una reunión para abordar la problemática generada a partir de las demoras en el servicio de colectivos entre Paraná y Santa Fe. Participaron del encuentro, organizado por la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Paraná y la Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad Nacional de Entre Ríos (UNER), representantes de distintos sectores involucrados de diferente modo en el tema y hubo coincidencia en la necesidad de trabajar en conjunto para cambiar la situación definida como “insostenible”. Los inconvenientes ocasionados por la falta de unidades ante la cantidad de usuarios se dan principalmente en horas pico -al comienzo de la mañana, al mediodía y por noche- e implican esperas largas, de hasta tres horas, se advirtió.
Estuvieron presentes integrantes de centros de estudiantes de universidades Entre Ríos y Santa Fe, autoridades de de facultades de la UNER y de la Universidad Autónoma de Entre Ríos (Uader), funcionarios de la Región Centro y de la Secretaría de Transporte provincial, concejales de la ciudad y usuarios autoconvocados. De las instituciones convocantes, participaron el Defensor del Pueblo Adjunto, Pablo Donadío, y la Decana de la Facultad de Ciencias de la Educación, Gabriela Bergomás.
Tras coincidir en la descripción del problema, los asistentes convinieron volver a reunirse el próximo martes 5 de mayo, a las 9.30, en la sede de la Facultad de Ciencias de la Educación (Alameda de la Federación 106). También se acordó invitar a autoridades de Santa Fe y reiterar la convocatoria a la Comisión Nacional Reguladora del Transporte (CNRT), organismo con jurisdicción en el servicio que no asistió el martes.
Los reclamos de los usuarios comenzaron a llegar a la Defensoría del Pueblo apenas comenzó la actividad académica en ambas ciudades. Las colas interminables y la tardanza para poder acceder al servicio fueron los principales motivos de las quejas de estudiantes y también trabajadores. «Para llegar a las 8 a clase a Santa Fe, hay que salir a la 6», fue uno de los ejemplos dados por los usuarios.
En ese sentido, el Defensor Donadío dijo en la reunión que Ersa Fluviales y Etacer cuentan con 15 y 14 unidades, respectivamente, cantidad que evidentemente no logra cubrir las franjas horarias de mayor demanda. Seguidamente, comentó que según la información proporcionada por sectores empresarios, el contrato de concesión existente prevé la utilización de nueve unidades por firma, lo que sería una muestra de la necesidad de actualizar dicho vínculo contractual. Por su parte, los representantes de la Secretaría de Transporte de Entre Ríos informaron que la prestación del servicio interubrano Paraná-Santa Fe es de jurisdicción nacional, por lo que la injerencia de esa repartición es acotada. De igual manera, aseguraron que elevan sugerencias y pedidos a las empresas.
Además de las demoras, el Defensor del Pueblo mencionó otro problema: la imposibilidad de comprar tarjeta o recargar el plástico en determinados horarios, por ejemplo después de las 20, cuando cierran las ventanillas de venta. Si bien remarcó la importancia de la implementación de la tarjeta Sube, mencionó las nuevas dificultades. En ese sentido, una estudiante expuso su queja respecto de la imposibilidad de acceder al boleto estudiantil, fijado en 7 pesos con la Sube. Habló de los trámites realizados para obtener el pasaje para estudiantes y las respuestas: «Hay que esperar hasta el año que viene». Mientras tanto deben abonar el pasaje general de 8 pesos, dijo. La estudiante también se refirió al trajín que padecen los jóvenes que cursan en las facultades de la Universidad Nacional del Litoral (UNL) ubicadas en El Pozo. Afirmó que aquellos que salen de clase a las 22, les resulta un problema tomar el colectivo y se quejó de la organización del servicio que no permite a una de las empresas, Etacer, entrar a ese lugar y subir pasajeros.
Por su parte, el concejal Miguel Rettore (UCR) dijo haber observado las largas colas de usuarios en la terminal de ómnibus de Paraná y calificó la situación de inadmisible; al tiempo que recordó el avance logrado con la disposición de prohibir el transporte de pasajeros parados en las unidades Etacer- Fluviales. Ahora bien, no puede ser que se arregle una cosa y se desarregle otra, opinó en relación a que si bien la gente ahora viaja sentada, tiene que esperar en una cola hasta tres horas. Seguidamente, el concejal socialista Marcelo Haddad habló de la necesidad de que, desde el Estado, se habiliten espacios orgánicos de participación de sectores de la sociedad que permitan analizar y debatir la calidad del transporte público. Se refirió concretamente a la figura de la Mesa del Transporte, existente en el ámbito municipal pero con una instrumentación casi nula.
En tanto, los representantes de los estudiantes pidieron una solución urgente al tema del colectivo y las autoridades de las distintas facultades (UNER-UADER) coincidieron en que el problema ha impactado fuertemente en la matricula. Es que hay estudiantes que han abandonado la carrera o directamente desisten de anotarse ante las dificultades para viajar, se planteó en la reunión. Laura Salazar, Decana de la Facultad de Trabajo Social (UNER), sostuvo que los problemas impactan en estudiantes, docentes, trabajadores y jubilados por igual. Y aclaró que la situación no sólo se estaría dando en los colectivos que unen Paraná y Santa Fe, sino también en el servicio urbano de la ciudad y de otras localidades.
En tanto, la otra medida consistió en la presentación formal de la problemática al Secretario de Transporte de la Provincia, Juan Carlos Chagas, quien informó que iniciaría gestiones en áreas nacionales, con jurisdicción en el servicio interurbano entre Paraná y Santa Fe.
“La función de la Defensoría consiste en recordarle al Estado los derechos que tienen los ciudadanos y exigir que se cumplan”, dijo el Defensor Donadío. Seguidamente, señaló que en este caso se trata de un servicio público cuyo control y prestación son exclusiva responsabilidad del Estado.