“Los conflictos por la convivencia son los más habituales en las mediaciones”
De acuerdo a lo que remarcó Chausovsky, la mediación “es un recurso accesible para toda la ciudadanía y expandió sus posibilidades gracias a la pandemia al incorporar la mediación a través de medios tecnológicos”. En ese sentido, repasó cómo fueron los inicios de esta nueva modalidad: “Los mediadores teníamos temores respecto de si íbamos a poder manejar las situaciones a distancia, si íbamos a poder conectar y ver las emociones como las sentimos de cuerpo entero y otras de las situaciones que nos generaban temor era que los mediadores íbamos a estar en nuestras casas y los participantes de la mediación en la suya y, si se enojaban, ellos iban a estar muy cerquita, pero nosotros no”. De igual manera, remarcó que ninguno de los temores de los mediadores se efectivizó y la mediación virtual “se transformó en un recurso muy útil porque pudimos ver cómo a través de las pantallas se conectan emociones y se generan los climas adecuados”.
Los conflictos más habituales
“La mediación sigue siendo un recurso posible”, sentenció la mediadora. Y en esa línea, diferenció: “La mediación del Centro de Mediación de la Defensoría del Pueblo de Paraná es una instancia que se ofrece a los vecinos de manera gratuita y voluntaria, y los vecinos invitados pueden aceptar o no; pero en la mediación pre-judicial, la convocatoria es de carácter obligatoria cada vez que se inicia un juicio en ciertas temáticas tipificadas y si se resuelve en esa instancia, el tema se da por concluido”.
“Los conflictos vinculados a la convivencia son los más habituales, aquellos con los que nos encontramos y nos desencontramos, como la medianera, las filtraciones de humedad, los árboles, la basura, la música, los chicos que juegan a la pelota, el humo del domingo o de otros momentos, como cuando la chimenea está pegada a la medianera y el calor pasa al vecino, lo cual es un problema en el verano”, especificó Chausovsky al remarcar: “Los conflictos tienen que ver con situaciones particulares”. “Si uno escucha música a las 10, pero su vecino trabaja de noche y llega a su casa a las 6 o 7, después quiere descansar. Entonces, todo depende de las situaciones particulares de quienes la viven y de la intensidad del conflicto”, remarcó.
“Los conflictos en los que podemos interceder son los vinculados a la convivencia entre vecinos y respecto de las cuestiones familiares, solo los aspectos económicos”, aclaró al subrayar uno de los temas a los que suelen atender: “Cuando diferentes ramas de una misma familia viven en un mismo terreno”.
De acuerdo a lo que comentó, “los problemas de filtraciones de humedad, los perros y las construcciones” son los problemas de convivencia más habituales en las mediaciones.
En el caso de los acuerdos por cuota alimentaria entre padres separados, refirió que “el convenio entre partes vale porque se pone la firma, pero no tiene ejecutabilidad; aunque sí puede servir para un reclamo judicial”.
Según recalcó Chausovsky, la tarea de los mediadores es la de “invitar a las partes a conversar, a encontrarse, a mejorar una conversación que venía complicada o a tener una conversación que no existía”. “La invitación al encuentro es para que cada uno explique qué le afecta y cómo se siente, qué valor tiene cada situación”, destacó al revelar que “de 500 casos que atienden por año, existe entre un 85 y 90% de resolución”.
Los interesados en mayor información deben dirigirse a calle Irigoyen 236, de lunes a viernes de 8 a 13; o comunicándose al 4211029 o vía WhatsApp al 343 5163712. (Elonce)